Plántate delante del armario y revisa: vaqueros, camisa blanca, litttle black dress (ya sabes de lo que estoy hablando), jersey, gabardina y americana. ¿Lo tienes todo? Pues entonces estás salvado. Son los considerados básicos y, aunque podríamos incluir algunos más, con estas prendas combinadas de forma correcta no hay estación que se nos resista. Pero yo siempre apuesto por que, además de que sea básico, tenga un punto que lo haga tuyo, diferente a los vaqueros, gabardinas o americanas del resto de armarios. Por eso vamos a buscar en las distintas tendencias y estilos aquellas piezas que este año deben venirse con nosotros.

Vaqueros o jeans. Este año, gracias a la tendencia boho-chic que continúa con nosotros, podremos encontrar los acampanados (aquellos que se ajustan en el muslo y se abren ligeramente hasta el tobillo) o los flare o considerados pata de elefante.  Pueden ser una buena inversión si te gustan y sientan bien a tu cuerpo. También los encontrarás rectos, slim (sabes que esta tendencia queda un poco olvidada esta temporada), boyfriend o boyish que son la versión femenina de los anteriores. ¿Mi opinión? Hazte con los que quieras e incluso de varios modelos. Los vaqueros son imprescindibles para sacarte de un apuro en cualquier ocasión. Juega con los estilos y adáptalos según te convengan.

Camisa blanca. Otro de los básicos y, en muchas ocasiones, gran olvidada en los armarios femeninos. Aunque la cogimos prestada del guadarropa de los chicos, debemos contar con ella para cualquier ocasión. Un look masculino, glamouroso, bohemio… todo puede construirse con una camisa blanca, sólo debes dar con la acertada. Si quieres optar la clásica camisa blanca con corte masculino, no olvides darle ese toque de feminidad con unos buenos tacones o un labial en tono rojo. Si prefieres hacerte con un toque más bohemio apuesta por el lino. Seguramente habrá detalles que sean diferentes. ¿Quizás con un lazo al cuello tan tendencia esta temporada? Por el contario, también puedes escoger una camisa de seda para tus looks más estilosos. Una falda midi y unas sandalias joya pueden ser tus perfectos compañeros.

Little black dress. Quizás sea mi favorito por todos los aprietos de los que ha conseguido salvarme. Un vestido negro de cóctel es un fundamental para tener un buen fondo de armario. Elígelo teniendo en cuenta  las distintas situaciones que tendrás que afrontar con él. Si lo eliges de algodón y a la rodilla, puedes combinarlo con deportivas blancas y bomber para un look más sport-chic. En una entrevista de trabajo puede quedar bien si es de elastano, con bailarinas y camisa blanca por debajo, donde sólo asomen los cuellos (un dos por uno en lo que básicos se refiere). También puedes optar por él para un evento: llevándolo en terciopelo con unos buenos stilettos  y joyas adecuadas no necesitarás nada más.

Jersey. Vivió su época de esplendor en 1980 y cada otoño invierno retoma con fuerza. Si quieres acertar en tu compra nada de estampados y hazte con colores muy básicos. Este año se llevan los que tienen el cuello vuelto (por suerte para las frioleras) y puedes construir looks con un estilo bohemio si los combinas con esos jeans acampanados o flare que hablábamos al principio. Para looks más estilosos, apuesta por un jersey en tonos negro o azul marino con falda lápiz. ¡No falla!

Gabardina. La prenda más conocida de Burberry y utilizada por las tropas de Gran Bretaña a principios del siglo XX también entra dentro de estos destacados. Sus combinaciones pueden ser infinitas y más en esta época del año donde los días lluviosos predominan sobre el resto.  Todas las prendas anteriores puedes complementarlas con la gabardina. El color estrella de esta prenda es el beige pero si quieres darle tu toque personal, puedes elegirla en marino o verde militar así como personalizar el cuello con tachuelas o botones originales, cambiar el cinturón y los puños originales por unos de cuero o quitar las mangas y hacerte un chaleco (otra de las prendas más demandadas esta temporada).

Americana. Es la última, y como se suele decir, no menos importante. Podemos encontrar la típica americana recta, con un corte más masculino; la entallada que suele ajustarse más al cuerpo de la mujer; la chaqueta de tweed o de estilo Chanel o la tipo esmoquin. Combinable tanto con zapatillas como con bailarinas y botas, la idea es sacarle el máximo partido a una prenda que consideramos ‘arreglada’. Apuesta por utilizarla con una camiseta básica con mensaje, vaqueros y zapatillas. Verás como la cosa cambia.

Algunas propuestas con básicos. Fotografías. Pinterest