Toca ser sinceros. Yo lo he imaginado mil veces. Cuándo será. Dónde. De qué firma será el vestido. Quién será él. Cuál será la respuesta … ¿Quién no ha imaginado nunca el día de su boda?

Para mí, y seguro que para muchos de los asistentes, algunas de estas preguntas tienen ahora algo más de forma. Después del evento de presentación de la colección 2015 de novias y fiesta de El Taller de Regina y el Sastre cualquiera salia con ganas de pasar por la vicaria. Todo, hasta el más mínimo detalle, parecía sacado de una película con final feliz. Y es que el sitio no era para menos. El lugar elegido, el Complejo Ortega, cuenta con unas instalaciones y un servicio digno de una gran celebración. Y no puede ser otra que el día de tu boda.

Desde el principio, todo me pareció un sueño. El sitio tiene unos jardínes preciosos en los que una boda por lo civil o al aire libre encajarían a la perfección. Aunque todo esto pasó a un segundo plano cuando comenzó el desfile.

Los tonos pastel, el impecable negro y el elegante gris fueron de los trajes más aclamados entre el público. El toque de pedrería le aportaba ese glamour necesario en un evento de este calibre. También los tonos más fuertes como el violeta, el azul, el magenta o el verde pudieron verse en modelos fiesta y novia de Rosa Clará con Aire Barcelona, Valerio Luna del grupo Higar Novias, Cabotine Privé, Matilde Cano o Gema Nicolás que ha sacado sus diseños en series como Velvet. Como complemento estrella los tocados o pamelas, bastante llamativos, y recomendables sólo en las bodas y actos de día. Para mí, un acierto seguro.

Y de las novias, ¡qué decir de las novias! Los escotes corazón y las faldas vaporosas fueron las grandes protagonistas. El blanco impoluto se mezclaba con el tul y gasas de las faldas. Las espaldas de los vestidos se convertían en el centro de todas las miradas: abotonadas, con lazos, encajes e incluso con escotes que aportaban al vestido un toque muy sexy. Para mí, ese fue uno de mis modelos favoritos, de manga larga, con un pequeño detalle a modo de cinturón y un bonito escote en 'forma de V' en la espalda. También había los que mezclaban las transparencias en el escote, y junto a la delicada pedrería, hacía que el vestido no necesitase más complementos.

Y para acabar, el desfile también contó con una última parte en la que pudimos ver algunas propuestas para los más pequeños. Las comuniones están a la vuelta de la esquina y son muchos los que ya han elegido su modelo. Entre los chicos continúa el clásico traje de marinero aunque también podemos encontrar otros modelos con aires nuevos y en colores como el azul claro o el beige combinado con el lila para la corbata. Las niñas complementan sus vestidos con tiaras de flores que le aportan sencillez a unos trajes en tonos crudos de líneas rectas y dulces, ideales para la celebración.

Sin duda alguna un evento de ensueño. Desde aquí agradecerle a Gema la oportunidad de acudir y poder cubrir el evento. Ha sido una experiencia preciosa que disfruté en la mejor de las compañías.

Y el viernes nueva entrada con más detalles de este evento. Porque sí, hubo mucho más.