“ Por muy perdido que te encuentres nunca pierdas la confianza en ti mismo. Ahí esta la clave.” Esto lo escribí en mi twitter personal hace unos cuatro días porque hay momentos en los que las situaciones pueden con nosotros y no podemos evitar decaer en nuestro proyecto. ¿Pero que seríamos sin esos pequeños momentos de flaqueza? Son las debilidades las causantes de nuestra fortaleza.  

Cuando atravesamos por un mal momento, cometemos un fallo o desistimos en una tarea, terminamos por salir recompensados. Aquí es donde demostramos realmente nuestra fuerza interior, nuestras ganas de luchar por lo que verdaderamente creemos y deseamos. Es aquí donde mostramos aquello que llevamos dentro y peleamos por él hasta conseguirlo.

Pero siempre debes tener algo presente. Tú y tu confianza en ti mismo son imprescindibles para que esto funcione. Sabes que puedes, que eres capaz de conseguirlo así que no te falles a ti mismo. Demuestrate que lo lograrás, y demuestrale al mundo que un mal día no va a poder contigo.

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