Estaba tardando. Después
de un verano de los “güenos” (como dirÃamos nosotras),
Septiembre llega para la tranquilidad de nuestros padres cansados a
estas alturas de las placenteras noches de verano. Me gusta
Septiembre, es un “nuevo año particular”. Para muchos lo es.
Nuevas metas, objetivos y otros quehaceres se suman a nuestra lista
de propósitos para el nuevo curso. Yo ya tengo las mÃas.
Este comienzo traerá
consigo numerosos cambios en mi dÃa a dÃa que se verán reflejados
por aquÃ. Comienza una etapa diferente y la empiezo con las mismas
ganas e ilusión que cuando preparaba mis libretas, libros y lápices
de colores para estrenar en el curso. ( De hecho, creo que era de las
pocas que deseaba escuchar ese famoso anuncio que nos preparaba para
la vuelta al cole).
Los primeros “frescos”
también me harán despeinarme y espero disfrutar de cada uno de los
momentos que los nuevos aires me traigan. Me basaré, principalmente
en dos verbos, cuidarse y aprovechar.
Cuidarse: tanto
fÃsicamente como mentalmente, apartarme de las cosas negativas de mi
vida y sólo sumar, sumar y sumar. No quiero nada que reste, estoy
dispuesta a no desaprovechar ni un sólo dÃa más y mucho menos por
pequeñeces. Como suele decirse: mens sana in corpore sano
Aprovechar al
máximo el dÃa a dÃa. Ya sea viajando, leyendo, escuchando música,
saliendo a cenar, divirtiéndome, comprando, estudiando, aprendiendo,
escribiendo,
trabajando o disfrutando de mi tiempo libre quiero sacarle el máximo
partido al tiempo sin
desaprovechar ninguna oportunidad.
Dejarme sorprender con todo
lo que tengo a mi alrededor y exprimir cada acción a partir de
ahora. La contestación NO y
sus derivados van a desaparecer progresivamente de mi vocabulario,
prometido.
FilosofÃa
de vida para este inicio, sin perder la vista nuestro “lo mejor de
la vida despeina”